La carga de la vida (Jinsei no onimotsu, Heinosuke Gosho, 1935)

Sucede algo curioso con esta película, y es que la imagen que aparece en wikipedia de Kinuyo Tanaka, y por lo tanto la más reproducida suya, pertenece a la promoción de este film familiar de Heinosuke Gosho de apenas una hora. Es por eso que me puse a verlo, intrigado además por la imagen en sí, en la que aparece junto a una especie de despertador, y que incluso se corresponde con los carteles que hay de la película, pero una vez vista, para relativa sorpresa mía, me encuentro con que ni Tanaka es la protagonista, ni usa apenas kimono, pues hace el papel de moga, la hija moderna de los verdaderos protagonistas, ni veo el reloj por ninguna parte… En fin, al menos no tengo la sensación de haber perdido el tiempo. 

La carga a la que se refiere el título son los hijos, en concreto al cuarto hijo del matrimonio protagonista. Ella es Mitsuko Yoshikawa, que hace de madre con gafas en muchas pelis de esta época, y él Tetsuo Saito, junto con ella uno de los primeros protagonistas habituales del Ozu de los 30. Y es que por ser una producción Shochiku nos encontramos con unos cuantos intérpretes habituales de aquellas pelis que repasamos a comienzos del Especial Ozu. Entre ellos está el niño Masao Hayama, que aparece también en El hijo único y otras tanto de este maestro como de Hiroshi Shimizu. Hayama-chan interpreta al cuarto hijo del matrimonio, nacido ya en los 40 de ambos, que una vez que han logrado casar a sus tres hermanas mayores, queda pendiente de terminar su crianza y es esto lo que lleva al conflicto principal, que solo se plantea a mitad de película y de una forma algo inesperada para nosotros, que estábamos hasta entonces más pendientes de los avatares de las hermanas y de sus respectivos maridos.

Tras la boda de la pequeña de las hijas, que como digo sucede mediado el metraje, lo que hasta entonces es una especie de comedia con tintes picarones se torna en drama familiar cuando el padre, al volver a casa de la boda aún algo piripi, cae en la cuenta de que tiene otro hijo, que no parece muy espabilado, y que se lleva con él demasiados años y que no le apetece seguir criándolo, pues una vez casadas las hijas, a la que hay que buscar un hombre de provecho, ahora hay que hacer que el niño progrese en la vida, y el padre no parece dispuesto a tamaño sacrificio. La secuencia en la que sucede esto, en la que discute con su mujer que inmediatamente decide abandonarle, es vista hoy un tanto anonadante. 

¿Cómo puede ser que el padre no haya pensado antes en su hijo pequeño? ¿Qué es eso de que está cansado de ser padre, si es un hombre acomodado, gerente de cierto nivel en su empresa, al que solo vemos atareado en trasegar sake calentito? ¿Para qué nos presentan a las dos hijas mayores y sus maridos, en especial a la joven Tanaka, como posibles generadoras de conflicto por sus moderneces y ser la manirrota esposa y modelo de un pintor de tercera, si luego no van a pintar nada? Tengo la sensación de que han cambiado el guion sobre la marcha, que empezaron a rodar y por algún motivo decidieron que el interés debía de virar hacia el niño y el viejo matrimonio. No les extrañe nada que así fuera.

Desde el punto de vista histórico Jinsei no onimotsu, sin ser una gran película, tiene la peculiaridad de que anticipa mejor que el propio Ozu el modelo de dramedia familiar que él inmortalizó por su genial estilo, pero que realmente era el género en el que Shochiku reinaba sobre toda la competencia, y al que por lo tanto se dedicaban otros directores, como aquí el siempre eficaz Heinosuke Gosho. Si se suele decir muy erróneamente que Ozu es el más japonés de los directores clásicos japoneses, creo que sí se puede decir acertadamente que, hasta Kurosawa, Gosho es el más occidental de ellos. Su forma de planificar, dirigir a los actores y resolver cada escena, aunque siga patrones reconocibles del gendai-geki de su tiempo, como por ejemplo la abundancia de planos a la altura del tatami, realmente la forma de resolver la continuidad y el uso de determinados modismos del cine de Hollywood de su época, como el reencuadre y muchos breves travellings para enfatizar según qué emociones, hacen que su cine nos parezca más familiar y cercano que el de otros compañeros suyos de fatigas, lo cual por cierto hace que las reflexiones y las decisiones de su personajes contrasten aún más con nuestra mentalidad occidental y contemporánea, pues vemos a la occidental lo que solo los japoneses comprenden. Aquí en youtube con subtítulos en inglés pero pésima calidad.

4 comentarios sobre “La carga de la vida (Jinsei no onimotsu, Heinosuke Gosho, 1935)

Agrega el tuyo

  1. Hola tocayo

    Curiosa la historia «temporal» de Tanaka y su reloj «decó».

    Y -para demostrar que soy un «valiente» sin ver la peli ni ná- allá va mi tonti-teoría o versión del vaso mediolleno-mediovacío. Creo que la carga de la vida es la que está pesando sobre el padre que, tras preparar a tres hijas que, supuestamente, se ocuparán de los padres de sus esposos, siente que su retoño está aún demasiado verde para encontrar la que los soporte a ellos. Lo del abandono sé que puede arrasar con mi teorema pero cuando la vea ya se me ocurrirá algo.

    Un saludo, Manuel.

    Me gusta

    1. Hola tocayo,

      en efecto, a lo que tú dices es a lo que se refiere el título, más o menos. Es que para los japos de antaño lo de las hijas es a la vez un problema y una bicoca en términos hogareñoestratégicos. Por una parte, si te salían con muchos lunares o muy modernas corrías el peligro de que no quisieran o pudieran irse, con lo que te ganabas una criada para la vejez a costa de un sentimiento de culpa perenne por haber fallado. Por eso Primavera tardía y todas las demás pelis de Ozu que replican este asunto de la hija que no quiere casarse son desgarradoras en un sentido que nosotros no podemos entender.

      Por otro lado, cuando las hijas se casaban pasaban a ser hijas de sus suegros y en todos los sentidos dejaban de representar carga alguna para sus padres biológicos. Por eso el padre este se siente tan mal, porque «colocar» tres hijas es un poco como hacer tres doctorados, una cosa digna de admiración desde el punto de vista social, pero «trabajosa» desde el individual. Tanto que ni ha caído en que le quedaba un churrumbel al que aguantar hasta que sea hombre, y por el que siente una tremenda pereza.

      Tampoco pasa nada si «abandonas» la intención de verla y pasas palabra, tocayo, que se te van a achinar los ojos.

      Un abrazo

      Me gusta

  2. Ésta es una de esas películas que he visto pero de la que no recuerdo nada. Por suerte tengo FilmAffinity como chivato y veo que la vi el 2016 y le endosé un 7, así que es comprensible ese olvido absoluto.

    Simplemente venía a decir que para mí Gosho es mi gran asignatura pendiente del cine japonés. He visto pocas películas suyas pero algunas de ellas extraordinarias, y como sabrá en su época era considerado uno de los grandes. Hoy día gracias a internet podemos acceder a muchas de sus obras, y tengo varias acumuladas a la espera de profundizar más en él. De hecho, ya puestos, también tengo pendiente profundizar más en Shimazu, del que espero ver en breve la película a la que dedicó dos posts de los que no quise leer nada para que me pillara todo por sorpresa. Qué gran cosa que eso del cine japonés clásico no se agote nunca…

    Un saludo.

    Me gusta

  3. Hola Doctor,

    tampoco se piense usted que yo soy experto en estas lides. Me apuesto una costilla de cerdo frita a que ha visto usted más que yo tanto de Gosho como de Shimazu. Lo que ocurre es que cuando veo estas pelis casi siempre escribo algo, aunque no sea para publicarlo, simplemente para evitar o retrasar en lo posible esa irremediable desmemoria que usted menciona y que nos afecta a todos.

    Un abrazo!

    Me gusta

Replica a Manuel Pozo Cancelar la respuesta

Crea una web o blog en WordPress.com

Subir ↑

Capricho Cinéfilo.

Blog de Fernando Usón Forniés sobre análisis cinematográfico.

Diccineario

Cine y palabras

Pre-Code.Com

Celebrating Pre-Code Hollywood, 1930 -1934, when movies were sexy, smart, complex and a hell of a lot of fun.

sin sentido

opiniones irrelevantes sobre cine y otras cosas

Movies Silently

Celebrate Silent Film

Japanonfilm

beyond Kurosawa, ninja, and Godzilla

cinelibrista

Cosas de libros, cine y series

Insertos Cine

Estrenos, críticas, comentarios de cine y algunas notas sobre las visiones

Cine hasta el amanecer

"Un mundo nuevo no es más que un nuevo modo de pensar"

Esbilla cinematográfica popular

"Forgotten, but not gone"

La mano del extranjero

Blog sobre ficciones del cine, la literatura y el cómic

elcriticoabulico

Crítica de cine informal pero esmerada

39escalones

Reflexiones desde un rollo de celuloide

El blog de Hildy Johnson

Simplemente, un blog "de cine"

El Testamento del Dr. Caligari

Web dedicada al cine mudo con reseñas de películas, curiosidades, crónicas del Festival de Pordenone e información sobre Charles Chaplin, Buster Keaton, F.W. Murnau y todos los grandes cineastas de la era silente.

El Gabinete del Dr. Mabuse

Blog de reseñas cinematográficas